Los Aluxes son pequeños seres guardianes del monte: traviesos y protectores. Si se les respeta y se les ofrece comida pueden ayudar y proteger; si se les insulta, pueden causar daño o llevarse personas. Las familias deben seguir rituales y pedir con respeto para recuperar a los llevados.
País: México. Región: Yucatán. Comunidad: San Francisco Suc-Tuc.
Ts'íib: Ligia de los Ángeles Xoolchi
U fecha de grabación: June 11, 2025
Estudiantes:
Seres mitológicos de muy baja estatura, con rasgos humanos y a veces orejas puntiagudas. Guardianes del monte y la milpa.
Personas afectadas por los Aluxes; su comportamiento frente a los Aluxes (respeto u ofensa) determina si recuperan a los suyos.
Relata experiencias vividas en la comunidad, incluyendo la desaparición y recuperación de su hijo tras un encuentro con los Aluxes.
U'yik le narración completo ti' le historia antiguo
En la comunidad de San Francisco Suc-Tuc, hay una leyenda que se cuenta con misterio y respeto. Se dice que los Aluxes son seres pequeños y misteriosos que habitan en el monte…” “Dicen que tienen el poder de llevarse a personas, especialmente niños, a lugares desconocidos. Cuando un Alux se lleva a alguien, la familia debe tener mucho cuidado al tratar de recuperarlo.” “Si la familia insulta o falta al respeto a los Aluxes, pueden regresar a la persona con graves heridas o incluso muerta. Pero si la familia muestra respeto y hace un ritual para pedir la liberación de la persona, los Aluxes pueden devolverla sana y salva.” “El ritual consiste en decir tres veces "Devuélvanme a mi hijo" o "Devuélvanme a mi ser querido" sin insultar a los Aluxes. Si lo hacen correctamente, los Aluxes pueden regresar a la persona con bien.” “Algunos dicen que los Aluxes pueden dejarle marcas o señales en el cuerpo, mientras que otros dicen que pueden devolverlo sin ningún daño. La gente de San Francisco Suc-Tuc cree que los Aluxes son seres poderosos que deben ser respetados y venerados.” “Se dice que si se les muestra respeto y se les ofrece comida y bebida, pueden ser generosos y proteger a la comunidad. Pero si se les falta al respeto, pueden castigar a quienes lo hacen.” “Los Aluxes pueden aparecer en forma de niños o ancianos, y pueden ser vistos en el monte o en los caminos que lo atraviesan. Si se les ve, es importante ofrecerles comida y bebida, y hablar con ellos con respeto y amabilidad.” “La leyenda de los Aluxes es una historia que se ha transmitido de generación en generación en nuestra comunidad. Es una historia que nos recuerda la importancia de respetar y cuidar el monte y sus habitantes.” “Así que, si alguna vez te encuentras con un Alux en el monte, recuerda ofrecerle comida y bebida, y hablar con él con respeto y amabilidad. De esta manera, podrás asegurar la prosperidad y la seguridad de nuestra comunidad. Narración de la experiencia vivida ( Narrada por : Ligia de los Ángeles Xool chi ) Son los guardianes de los montes. Son como dueños de los montes, del monte. Que antes ellos cuidan la milpa. Si alguien entraba en la milpa y no es el dueño, ellos se encargan de cuidarlo. Hay veces ellos lo tiran con piedras y la persona ahí se queda. Entonces cuando la persona logra levantarse se va a su casa pero le viene una calentura que no se le quita entonces sus familiares tienen que hacer una comida como un ritual en el monte para que ellos lo perdonen porque entraron sin permiso y yo sí creo que existen porque a mí me tiene pasado que a mi hijo lo llevaron. Yo ese tiempo salía a lavar mis trastes. Esos niños andan en los terrenos, jugando de tres a cuatro de la tarde. Ellos andan jugando en los terrenos. Por eso mucha gente a esa hora no sale a sus terrenos. Entonces yo me fui a lavar mis trastes atrás de mi casa y amarré a mi hijo en su hamaca. Le amarré los dos lados de la hamaca y lo metí ahí en su hamaca y me salí a lavar mis trastes. De repente se me acordo mi hijo y lo fui a ver y veo que su chancletita esta bajo la hamaca Y la hamaca esta como lo puse Entonces digo que vino mi hermano a buscarlo Y andaba yo viéndolo, andaba yo gritando. Y vi que no me contestó y me fui en casa de mi mamá a preguntarlo si no lo llevaron. Llegué allá y le digo a mi mamá si no llevaron al niño. Me dice mi mamá, no, dice, si no hay nadie aquí. Y entonces le digo a mi mamá, pues el niño no está en mi casa, su hamaca está como lo dejé amarrado de los lados y su zapatito debajo de la hamaca. Y entonces mi mamá como cree en eso también, me dice, no insultes, vamos a buscarlo. Y lo anduvimos buscando en su terreno, de mi mamá no hay nada. Nos regresamos a mi casa, lo andábamos buscando y todos se juntaron y lo andábamos buscando. Y nada que aparece el niño. Entonces nos fastidiamos a buscarlo, nos sentamos. Ahí estábamos allá llorando que el niño no aparece. De pronto que se alza mi cabeza y veo a mi nene que está paradito atrás de la casa. Y fuimos corriendo a verlo, está todo lastimado y raspado su manito, su cara, su ropita está roto. Y como no insultamos, esos niños nos lo mataron. Porque si nosotros viéramos insultado, sí lo vamos a buscar al niño, pero muerto. Por eso yo digo que esos niños sí existen, porque yo ya pasé esa experiencia._